El atractivo del poder

¡Momento de reflexión, bloger@s!

El poder está reservado a unos pocos, pero fascina a mucha gente...

¿Pero, por qué el poder resulta tan atractivo? 

Existen varias explicaciones y una de ellas es que hace a una persona destacar entre los demás, pasando a ser un valor en alza muy atrayente: un individuo con éxito en un mar lleno de seres anónimos.

Ya sea un hombre o una mujer, la persona poderosa tiene acceso a un mundo exclusivo lleno de placeres variados que la coloca en una posición envidiable en el mercado del atractivo sexual, y su compañero o compañera sexual podrá aprovechar y disfrutar ese éxito y sentir que su autoestima sube más allá de las nubes y, a su vez, podrá atraer miradas y despertar deseos. 

La erótica del poder no es todo glamour y satisfacción porque el poder requiere tiempo y mucha energía, y los adictos a él llegan a descuidar sus relaciones de pareja, e incluso caen en una espiral en la que el éxito, por sí solo, ya les aporta suficiente placer, provocando en la pareja una gran desilusión y sensación de abandono en todos los aspectos, incluso en el sexual. Salvo que la relación sea sólida, tendrá los días contados, haciéndose realidad la frase "la soledad del poderoso".

¿Es solo un mundo de hombres? 

Es bastante habitual ver a hombres de éxito rodeados de hermosas y jóvenes mujeres de cuerpo perfecto que despiertan sentimientos de envidia, como en el caso de Nicolas Sarkozy (57) y Carla Bruni (45). 

No es para nada raro, al ver estas parejas plantearse la duda: ¿Se casó Carla Bruni por amor o le sedujo el poder? Qué más da. Al fin y al cabo el deseo es el deseo y lo puede movilizar la belleza, la simpatía, la inteligencia, y ¿por qué no? el estatus. 

Irremediablemente es así. El poder seduce nos guste o no. Así lo demuestra el número de mujeres poderosas de edad madura, que resultan muy atractivas para mucha gente por su éxito. Así que ya no es un mundo exclusivo de hombres y que ellas están entrando con fuerza en esta parcela del erotismo.

El poder es muy atrayente y nos puede atrapar con sus redes pero, en una sociedad tan cambiante como la nuestra, se puede acabar, tal y como les ocurre a los políticos que pierden unas elecciones, a los empresarios cuyos negocios quiebran, a los famosos que caen en el olvido, etc. En estos casos: ¿Seguirán ostentando su atractivo?

 Flavio Briatore (62) y su mujer Elisabetta Gregoracci (32) 

George Clooney (51) y su actual pareja Stacy Keibler (33) 

Susana Uribarri (45) y Darek (32)

Madonna (54) y su novio Brahim Zaibat (24)

¿Te atraen las personas poderosas? ¿Has sucumbido a los encantos del poder? ¿Eres capaz de admitir que te mueve el interés?